domingo, febrero 19, 2012
Y es que sigo teniendo esa carta guardada para no poder perderla jamás. Porque significa demasiado para mí, por el simple hecho de que me la escribiste tú con todo tu cariño.
Un día que yo estaba triste, y sentía que mi mundo se derrumbaba. Ahí estabas tú, llegaste y me sacaste una sonrisa cuando mas lo necesitaba. Incluso me hiciste llorar, pero de alegría. Fuiste ese rayo de sol esperanzador en un día lluvioso de invierno. Me transmitías ese calor especial. Porque tú eras y sigues siendo especial.
A pesar de la distancia y llevar tanto tiempo sin verte, para mi es como si te hubieses ido una pequeña temporada. Tengo la esperanza de volverte a ver. Y sé que tarde o temprano podré darte otro abrazo como el que selló nuestra despedida. Aún recuerdo que me tuviste que apartar porque yo no quería soltarte. Te abracé con todas mis fuerzas para que supieras todo lo que te quería, y te sigo queriendo. Porque para mí has sido mucho más que una amiga, incluso que una hermana, has sido alguien más que especial...
Eres genial y te deseo lo mejor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario