viernes, octubre 19, 2012

Tu sonrisa.

Tu sonrisa. 
Esa que es débil y brillante, tenaz y desafiante. 
Esa que hace esperar al tiempo.
Esa que despierta hasta al más perezoso sentimiento.
La que merece un monumento.

Tu sonrisa.
Esa tan endeble que parece de cristal.
Tan delicada y suspicaz.
Tan breve y vulnerable.
La que de verdad merece que hable y le diga:
Que nace donde se juntan el cielo y el mar.
Donde se unen la luz y la oscuridad.
Donde luchan amor y paz.
Donde existe lo imposible...

Porque tu sonrisa es única, no tiene igual. 
No parece ni real...



Sentimientos fugaces.

Pequeños detalles que pasamos inadvertidos. Cosas simples y pequeñas que no apreciamos cuando están ahí por segundos pero nos invade la nostalgia cuando nos damos cuenta de que se han ido.
Cosas como...
El olor a café recién hecho en una mañana de invierno.
El calor de un abrazo.
Nuestro cuarto alumbrado por la luz de la luna.
El estribillo de una canción.
El sonido que creamos al caminar sobre la nieve.
El olor a tierra mojada cuando llueve.
El primer trago de una bebida caliente recorriendo todo nuestro cuerpo.
La alegría que te da cuando ponen tu canción favorita en la radio.
Esa película que viste una vez y no te afectó, pero al verla después de mucho tiempo te hizo llorar como un niño.
El calor al ponerte una prenda recién planchada.
El olor a suavizante en la ropa.
El sonido de la lluvia en los cristales.
La sonrisa de un niño.
El lametazo de un animal demostrándote su aprecio.

Son cosas simples, cosas que podemos tener día a día. Simples sentimientos. Sentimientos fugaces. Fugaces como tu sonrisa.



domingo, octubre 07, 2012

Decisiones.

A lo largo de un día nos enfrentamos a más de cien decisiones y a sus consecuencias. Con cada decisión vamos creando nuestro camino, guiándolo por distintos lugares. A veces, aunque creamos que nosotros decidimos por dónde ha de ir el camino, es al revés, el camino decide a dónde vamos nosotros.

Hay personas que creen en un camino llamado "Destino". Creen que su historia ya está escrita y sólo se limitan a seguirla, a dejar que el camino les lleve hasta su final.
Otras, sin embargo, piensan que pueden modificar su camino como quieran, pueden elegir como vivir, como recorrer el camino antes de llegar a ese final.
Ambas creencias coinciden en que hay un final al que todos vamos a llegar.

Personalmente, creo que no hay que conformarse con lo que nos da la vida. No hay que conformarse a lo que estamos "predestinados". Tienes que saber llevar tu vida, hacerla tuya de verdad, y eso lo consigues sólo tomando tus propias decisiones y afrontando las consecuencias de tus actos.

"Si no actúas como piensas, vas a terminar pensando como actúas."

Con esto quiero decir que tienes que saber llevar las riendas de tu vida, hacer lo que de verdad quieras. Si tienes que pararte a pensar en las consecuencias que pueden traer tus actos, hazlo, pero no dejes que tu camino te lleve. Son nuestros actos los que nos definen, los que nos crean, nos cambian, nos enseñan y solo nosotros decidimos quién queremos ser y no nuestro destino.